12 Allée de la Grassinais, 35400 Saint-Malo
El Hôtel La Grassinais, en la entrada sur de Saint-Malo, encarna la elegancia atemporal y el confort contemporáneo en un entorno cargado de historia. Ubicado en una Malouinière del siglo XVII, este edificio combina armoniosamente sus vigas originales y piedras antiguas con equipos modernos, creando así un lugar único, donde cada detalle invita a la serenidad. En pocos minutos en coche, sumérjase en la efervescencia de la ciudad corsaria, descubra sus famosos muros, sus extensas playas y el imprescindible Gran Acuario.
Las 29 habitaciones del hotel, todas para no fumadores, son verdaderos refugios de tranquilidad. Con ropa de cama de alta gama y baños privados elegantemente renovados, garantizan un confort óptimo. La televisión de pantalla plana, el Wi-Fi de fibra ultrarrápida y una bandeja de cortesía con té, café y dulces completan la experiencia. Ya sea que viaje solo, en pareja, en familia o con amigos, cada espacio está diseñado para recibirle en un ambiente acogedor y relajante. Y para los más pequeños, se puede instalar una cuna bajo petición.
Cada estancia en La Grassinais está enriquecida con atenciones cuidadosas: productos de acogida cuidadosamente seleccionados, un espejo amplificador en el baño, o noches de calma absoluta en un entorno alejado del bullicio. El hotel sabe combinar confort y refinamiento, ofreciendo un equilibrio perfecto para una escapada revitalizante.
Para los viajeros que buscan practicidad, el aparcamiento privado gratuito facilita sus desplazamientos, ya sea que desee explorar los tesoros de la Costa Esmeralda o llegar rápidamente a sus compromisos. Los profesionales apreciarán las salas de reuniones disponibles en el lugar, mientras que los amantes del descanso podrán relajarse en el solárium o disfrutar de los espacios exteriores acondicionados.
En cuanto a sabores, La Grassinais también seduce a los gourmets con su restaurante donde el chef Christophe Bouvier realza los productos locales en una cocina generosa y auténtica. Después de un día lleno de descubrimientos, disfrute de platos elaborados con pasión en un ambiente acogedor. Por la mañana, un bufé abundante y variado le espera para comenzar el día con energía.
El hotel también destaca por su ubicación ideal. En solo diez minutos en coche, puede pasear por las calles adoquinadas de Saint-Malo, admirar sus muros que dominan el océano o relajarse en las playas cercanas. Desde allí, déjese tentar por una escapada a Dinard, una estación balnearia popular, o a Cancale, famosa por sus sabrosas ostras y sus panorámicas marinas. Y para los amantes del patrimonio, el Mont-Saint-Michel, a una corta distancia, ofrece una experiencia inolvidable.
Desde el hotel, Saint-Malo revela todas sus riquezas. Pasee por los muros y déjese maravillar por la vista espectacular de la bahía. Regálese un momento de relajación en la playa del Sillon, ideal para largas caminatas o un baño refrescante. Cerca, el Gran Acuario promete una fascinante inmersión en las profundidades marinas, perfecta para pequeños y grandes.
Para los gourmets, restaurantes excepcionales como Le Saint Placide, con estrella Michelin, o Le Poncel le invitan a descubrir una cocina refinada e inventiva. Y si desea prolongar la experiencia bretona, una excursión a Cancale para saborear mariscos frente al mar es imprescindible.
Los apasionados de la historia encontrarán su felicidad en la Torre Solidor o en la Ciudad de Aleth, lugares impregnados de un rico pasado marítimo. Los amantes de la naturaleza apreciarán los senderos que bordean el Rance, con su famosa presa y sus paisajes apacibles.
El Hôtel La Grassinais es mucho más que un simple alojamiento. Es una invitación a vivir Saint-Malo de manera diferente, a disfrutar cada momento en un entorno lleno de encanto y autenticidad. Ya sea que busque una estancia romántica, familiar o profesional, este establecimiento le promete una cálida acogida y recuerdos inolvidables en Bretaña.
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